" Te juro que nunca más lo volveré a hacer "

Desde el inicio de las civilizaciones, los conflictos y problemas, entre grupos de personas, se solucionaban mediante batallas campales, con el fin de destruir al que se encontraba en  frente, sin embargo, aunque hemos evolucionado, igualmente, en nuestros días, la violencia se practica  de una forma brutal, pero de una manera más cautelosa, sin grandes enfrentamientos,  destruyendo física y moralmente al otro. En la actualidad, en la mayoría de los hogares, se ha producido algún tipo de violencia (física, psicológica o sexual), ya sea por parte del hombre hacia la mujer o viceversa, aunque con una mayor tasa que tiene como víctima a la mujer, por lo tanto, podemos decir que el hombre es el mayor responsable de los maltratos que se producen a nivel nacional, y que en su mayoría, los agresores también fueron agredidos en alguna ocasión.

  Según la directora del Serman de la región de Valparaíso, Ana María pacheco,  en conjunto con las autoridades de la isla de Rapa Nui, la mayoría de los casos de violencia intrafamiliar está dirigida hacia mujer.                                                                                                                                                                                                      .     De acuerdo a las estadísticas llevadas a cabo hasta la fecha, un alto porcentaje de las denuncias por maltrato intrafamiliar, tienen como víctima al integrante femenino de la familia. 

Este tipo de violencia es una mala acción que será muy difícil de borrar de la mente de las generaciones pasadas y las que están por venir, debido a que en el diario vivir se está mostrando la violencia como algo natural en nuestras vidas, ya sea en  noticieros, teleseries y en todos los medios de comunicación existentes, perpetuando la violencia a través de las generaciones.

 El maltrato es especialmente hacia la mujer, debido a que desde el principio de nuestra existencia  el hombre ha sido quien ha dominado en la relación de pareja  y producto de esto se piensa que la mujer es el ´´sexo débil´´, es por esta razón   que se cree y está dentro de la conciencia de algunos seres de esta época, que el recriminar y maltratar  es un hecho de valentía para demostrarse fuerte y poderoso ante sus iguales y además resaltar que el hombre todavía tiene dominio ante el sexo opuesto.          

Hace un tiempo atrás la violencia hacia el sexo femenino era producto de una sociedad machista, sin embargo, esto ha ido cambiando con el transcurso de los años, ya que en nuestro país hay igualdades para ambos sexos y la violencia está penalizada tanto para el hombre, como para la mujer.                                                                                      La violencia hacia el integrante femenino de la familia, se debe a que los agresores son quienes han vivido  desde pequeños en un ambiente violento, ellos han visto como su progenitor impartió violencia hacia sus madres y ellos mismos y   este hecho ha sido el que ha  perdurado en el tiempo.

Por esto, se puede deducir que todo ser humano que ha vivido en un ambiente donde la violencia es la solución a los problemas,  será un ser que todo resolverá  a golpes y malos tratos, ya que, será de su naturaleza actuar de forma agresiva, puesto que, fueron sus progenitores los que inculcaron a ellos  esta manera de resolver los problemas.

Además se puede confirmar según estudios aplicados en diferentes regiones de nuestro país, que en gran porcentaje los casos de violencia intrafamiliar van dirigidos hacia la mujer producto de que esta es un ser frágil y no acostumbra a actuar en actitud violenta, ya que, desde tiempos muy remotos ha sido ella quien ha entregado el amor y cariño a la familia, en cambio el varón desde el principio de la vida humana ha sido quien  ha aportado la parte autoritaria, puesto que, se considera el sexo fuerte, no por su estado físico, sino  porque su poder de mandato es mayoritario.


Francisca Mejías Martínez