miércoles, 1 de diciembre de 2010

Pensar antes de acabar con el derecho a vivir

El embarazo para las mujeres de antes era un orgullo y lo deseaban con todo el corazón, el tener un una familia numerosa las hacia feliz, incluso siendo muy jóvenes aceptaban a su bebé teniendo en cuenta el apoyo de su pareja y entorno familiar, o si sucedía lo contrario se esforzaban por sacar adelante a sus hijos aunque vivieran en una situación precaria, pero hoy en día sucede totalmente lo contrario muchas mujeres prefieren el método fácil, como si eliminar a un ser tan pequeño he inofensivo se le acabarían los problemas.


En nuestra sociedad actual se debería tener en cuenta que el aborto es una ofensa para la vida, ya que el tan sólo hecho de intervenir en la progresión de un ser humano es algo más que un homicidio. La Iglesia Católica muchas veces a hecho saber que el aborto ofende a Dios sobre todas las cosa ya que él es el único con la autoridad necesaria para decidir sobre la vida de una persona, aunque que en la biblia no aparezca la palabra aborto, si existe el asesinato de un ser inocente.
Cuando se habla que la vida tiene ser valorada y respetada por todos, es en ámbitos generales y a todos por igual, entonces intervenir y decidir por aquel ser vivo que esta creciendo significa no respetarla, incluso cuando existió un acto de violación aquel ser debería tener derecho a vivir y optar por tener una familia dándolos en adopción como en muchos casos, sabiendo que así el trauma de asesinar a un humano se evitaría.
Para una mujer de la edad que sea, un embarazo no deseado significaría un problema eterno y un gran rechazo hacia la vida que viene en camino, pero varios especialistas y psicólogos demuestran que es mas aún el trauma de asesinar al bebé que darlo a alguien que si desea tenerlo y protegerlo, como por ejemplo el psicólogo Christian Enrique Schnake Ferrer dice que  "Es más fácil sacar al niño del útero de su madre que sacarlo de su pensamiento".
Al dar en adopción significa que un niño mas crecerá con la dignidad y con los sentimientos que una verdadera familia le daría, además de los cuidados y preocupaciones que obtenga a lo largo del tiempo así tendría su derecho a vivir y ser feliz.


Con lo expuesto anteriormente queda en descubierto que el aborto es una intervención en la procreación de un nuevo ser humano y que ofende no tan solo la vida, sino también a la sociedad en general, ya que un niño que haya sido creado en cualquier circunstancia tiene derecho a vivir y compartir sus vivencias como cualquier otra persona.
Además se puede decir que aquella mujer que tiene la capacidad de desechar una vida,también está eliminando parte de la suya, ya que al fin y al cabo es parte de ella desde el primer momento que se engendró, sabiendo así que otras parejas que desean tener un hijo y que cualquier motivo genético u otro no los deja cumplir su sueño ,mientras otros sólo piensan egoistamente en ellos sin saber las consecuencias físicas y psicológicas que les causaría como el cáncer, pérdida del útero y un peor estado de salud mental.
En fin, abortar o asesinar a un ser inocente tiene serias consecuencias produciendo un mal para la vida, por lo tanto es algo que hay que eliminar de nuestras vidas urgentemente.




Karina Sepúlveda Bravo

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